Ligero, lleno de textura y con el sabor salobre del mar, este arroz frito con gambones es una celebración en cada cucharada. Perfecto para esos días en que quieres comer algo sabroso pero sin complicarte demasiado.
Productos con los que prepararla
Ingredientes
- 300 g de arroz jazmín ya cocido (preferiblemente frío, del día anterior)
- 8-10 gambones pelados y limpios
- 2 huevos batidos
- ½ taza de guisantes (frescos o congelados)
- 1 zanahoria pequeña en daditos
- 2 cebolletas (parte blanca y verde picadas)
- 2 cdas de salsa de soja ligera
- 1 cda de aceite de sésamo
- 2 cdas de aceite vegetal neutro
- Sal y pimienta al gusto
Instrucciones
- Calienta el wok con una cucharada de aceite vegetal y saltea los gambones rápidamente hasta que cambien de tono. Retíralos y reserva.
- En el mismo wok, añade otra cucharada de aceite si hace falta y vierte los huevos batidos. Haz un revuelto ligero, rompe en trozos grandes y reserva.
- Agrega más aceite si es necesario y saltea la zanahoria y los guisantes hasta que empiecen a suavizarse.
- Introduce el arroz frío al wok, rompe los terrones con la espátula y mezcla para que se impregne de calor por completo.
- Vierte la salsa de soja y el aceite de sésamo, mezclando bien cada grano de arroz.
- Incorpora de nuevo los gambones, el huevo y la cebolleta picada. Saltea durante un minuto más a fuego alto para unir sabores.
- Ajusta de sal y pimienta al gusto. Sirve caliente, idealmente en platos calientes para mantener su textura.
