No podemos negar que estamos ante un postre contundente y altamente calórico… y también ante una delicia digna de haber inspirado su propio nombre. Esta especie de flan concentrado, elaborado a con yema de huevo caramelizada, es típico de diferentes zonas de Andalucía. Su primera referencia escrita data del año 1924, y se atribuye a las monjas del Convento de Espíritu Santo de Jerez de la Frontera, a las que entregaban las yemas sobrantes después de usar claras de huevo para clarificar el vino típico de la zona.
Productos con los que prepararla
Ingredients
- 200 ml de agua
- 300 g de azúcar blanco
- 8 yemas de huevo de gallinas felices
- Caramelo líquido para los moldes
Instructions
- Poner el accesorio batidor en el vaso. Añadir los 200 ml de agua y los 300 g de azúcar, programar 16 minutos a 120℃, velocidad 2 y cerrar.
- Abrir la Chefbot y dejar reposar unos 10 minutos, hasta que el almíbar se haya templado un poco y no haya riesgo de que cuaje.
- Repartir bien una cucharada generosa de caramelo líquido en la base de 6 u 8 flaneras individuales (dependiendo del tamaño). Si cambiar el accesorio, programar la Chefbot 1 minuto y 20 segundos a velocidad 3, cerrar con el tapón de llenado abierto y añadir a través de él las 8 yemas de huevo una a una, dejando pasar unos 5 segundos entre una y otra.
- Poner 1 l de agua en el vaso sin ningún accesorio y colocarlo en la base de la Chefbot con el cestillo de vapor hondo tapado. Programar 35 minutos a 120℃ (activar la función vapor y ajustar el temporizador) velocidad 0.
- Repartir la masa del tocinillo en las flaneras, taparlas bien con film de cocina o papel de aluminio y disponer las flaneras en el cestillo hondo. Poner encima algunos trozos de papel de cocina o servilletas de papel, para absorber la condensación del vapor.
- Cuando termine el ciclo, abrir la tapa y comprobar que los tocinillos están listos insertando un palillo en el centro: si sale limpio, está listo. Si no, programar 5 minutos a 120℃ (activar la función vapor y ajustar el temporizador) velocidad 0.
- Dejar que los tocinillos se atemperen sin abrir el cestillo de vapor y, cuando estén a temperatura ambiente, ponerlos en la nevera al menos una hora antes de consumirlos.